Incluso llegué a pensar, cuando me atacaba ‘el viejazo’, si es que aún tendría la energía para ir buscando casa (sitio para acampar) todos los días, vivir las exigencias que significa un viaje como éste, hacerme cargo de una mascota, y muchas otras interrogantes que se venían a mi cabeza.
La respuesta es más simple de lo que pensé. Claramente fácil no ha sido, mis piernas sienten el cansancio, pero la energía la encuentro en todos lados.
La encuentro en el conductor de camión que se detiene y me ofrece comida, la encuentro en el amigo que me ofrece un techo y una ducha, la encuentro en esa llamada o mensaje que me da amor, la encuentro en la mirada de Toki cuando me escucha respirar intensamente en una subida, la encuentro en el paisaje que pocos se detienen a observar.
Pero lo más importante, la encuentro dentro de mí, cuando creo que no puedo más y aun así puedo seguir y encontrar un lugar seguro para dormir.
Todo lo que vivo cuando viajo en bicicleta, me confirma que el cicloturismo es un estilo de vida, y eso quiero transmitir a través de Rueda Chile.
En este momento miro mis pies, sucios y adoloridos, pero se que valdrá la pena.
Buena noche!
